⚓ Seven Seas Voyager
Descripción del barco: Es el tercer barco de RSSC y único en su clase, entró a servicio en 2003. De tamaño mediano con un Peso 49,000 tons, Eslora: 670 pies, Manga: 95 pies, Calado: 7,0 pies, Motores Diesel, Velocidad: 00 nudos, Capacidad: 700 pasajeros, Tripulación: 447.
Lanzado en 2003, Seven Seas Voyager es el tercero de los barcos Regent Seven Seas Cruises, único en su clase y junto al nuevo Explorer y los reformados Navigator y Mariner completa la flota de barcos de Regent Seven Seas Cruises. Fue construido en el astillero T. Mariotti en Genova, Italia y costó US $ 240 millones en la construcción, la última vez de su reforma fue en el año 2016. Con una capacidad de acogida para 700 pasajeros y 447 tripulantes, el Seven Seas Voyager ofrece la ventaja de ser espacioso y amueblado con gusto. El barco mide 204,2 metros de eslora y 56,1 metros de manga y pesa 42.363 toneladas. Seven Seas Voyager fue el segundo buque de crucero con balcón y suite 100% en el mundo, después de Seven Seas Mariner. El número de categorías de suites es 13. Seven Seas Voyager cuenta con un total de 353 suites, de las cuales 100% cuentan con balcón privado. Los más grandes son las Master Suites (1.220 m2).
El costo de Seven Seas Voyager de cruceros en una Master Suite significa los últimos paquetes de lujo Regent Voyager para un alojamiento con baño de crucero de 1.200 pies cuadrados (111,5 m2, con el balcón, la ubicación Cubierta 9). La categoría de suite más bajo en la nave Voyager es la "suite de lujo" (con precios alrededor de 3 veces más bajas que las tasas del Master).
Un verdadero palacio flotante el Seven Seas Voyager forma parte de la flota de la naviera Regent Seven Seas Cruises, especializada en cruceros de lujo. Al igual que otros barcos de la compañía, tales como el Seven Seas Navigator,el Seven Seas Voyager impresiona por su concepto de barco de cruceros ofreciendo sólo suites exteriores con balcón privado , así como por el lujo y la elegancia de la vida a bordo. Sus 350 suites, equipadas todas ellas de un balcón, cuentan con todo el confort moderno que se pueda desear. Las suites están distribuidas en 12 puentes y constituyen lugares excepcionales para disfrutar de cada momento del día pasado en alta mar.
Los 700 huéspedes del Regent Seven Seas Voyager disfrutarán las suites con balcón, que viene con comodidades de alta tecnología a bordo de esta encantadora nave. Similar a su barco gemelo el Seven Seas Mariner, el Voyager es sumamente amplio y se destaca por sus detalles de diseño único, como baños de mármol con ducha separada y tinas europeas. También hay un servicio de impresión por pedido de periódicos como el USA Today y The Wall Street Journal para aquellos que quieran mantenerse enterados de las noticias en el mundo. Para los huéspedes aficionados a los deporte, se proporcionan una pista para correr, gimnasio y canchas de tenis. O, para un día más relajante, visite el Canyon Ranch Spaclub, zambúllase en la piscina o pase una tarde de ocio explorando las boutiques. Termine su día con las delicias culinarias de uno de los cuatro restaurantes, incluyendo elSignatures, dirigido por la marca Le Cordon Bleu. Una selección de vinos, licores y champaña de cortesía se sirve por el barco durante todo el día.
El Seven Seas Voyager cuenta con muchas instalaciones de entretenimiento y ocio. Desde la sala de conferencias a la piscina pasando por la biblioteca bien surtida, la oferta de actividades a bordo es muy diversificada. En cada escala, los cruceristas podrán disfrutar de unas horas en tierra firme para visitar los lugares más emblemáticos de los países atravesados. A bordo del Seven Seas Voyager también encontrarán tiendas libres de impuestos en las cuales podrán comprar todo lo que deseen. El spa y el fitness por su parte son una invitación a la relajación.
Para el deleite de los gourmets, el Seven Seas Voyager ofrece siete formas diferentes de disfrutar de su gastronomía. En el Compass Rose, la cocina se inspira en las tradiciones culinarias de la cocina europea. También podrán ir al restaurante "La Veranda", más informal. Toda la gastronomía de a bordo lleva la estampilla de Blue Riband de "Le Cordon Blue" de París. Si lo prefieren podrán optar por el Prime 7 y su cocina típicamente americana, como el steak Porterhouse y las ostras Rockefeller.
Por la noche, los pasajeros del Seven Seas Voyager no tienen tiempo para aburrirse. Es posible comenzar con una copa en el Connoisseur Club antes de ir al Voyager Lounge , que se transforma en discoteca o karaoke después de la cena. Asistir a un espectáculo en el Teatro Constellation es otra alternativa para disfrutar de su velada a bordo del Seven Seas Voyager. Si desean un poco de tranquilidad podrán sentarse tranquilamente en el Observation Lounge y admirar el maravilloso paisaje que desfila delante de sus ojos.
El costo de Seven Seas Voyager de cruceros en una Master Suite significa los últimos paquetes de lujo Regent Voyager para un alojamiento con baño de crucero de 1.200 pies cuadrados (111,5 m2, con el balcón, la ubicación Cubierta 9). La categoría de suite más bajo en la nave Voyager es la "suite de lujo" (con precios alrededor de 3 veces más bajas que las tasas del Master).
Un verdadero palacio flotante el Seven Seas Voyager forma parte de la flota de la naviera Regent Seven Seas Cruises, especializada en cruceros de lujo. Al igual que otros barcos de la compañía, tales como el Seven Seas Navigator,el Seven Seas Voyager impresiona por su concepto de barco de cruceros ofreciendo sólo suites exteriores con balcón privado , así como por el lujo y la elegancia de la vida a bordo. Sus 350 suites, equipadas todas ellas de un balcón, cuentan con todo el confort moderno que se pueda desear. Las suites están distribuidas en 12 puentes y constituyen lugares excepcionales para disfrutar de cada momento del día pasado en alta mar.
Los 700 huéspedes del Regent Seven Seas Voyager disfrutarán las suites con balcón, que viene con comodidades de alta tecnología a bordo de esta encantadora nave. Similar a su barco gemelo el Seven Seas Mariner, el Voyager es sumamente amplio y se destaca por sus detalles de diseño único, como baños de mármol con ducha separada y tinas europeas. También hay un servicio de impresión por pedido de periódicos como el USA Today y The Wall Street Journal para aquellos que quieran mantenerse enterados de las noticias en el mundo. Para los huéspedes aficionados a los deporte, se proporcionan una pista para correr, gimnasio y canchas de tenis. O, para un día más relajante, visite el Canyon Ranch Spaclub, zambúllase en la piscina o pase una tarde de ocio explorando las boutiques. Termine su día con las delicias culinarias de uno de los cuatro restaurantes, incluyendo elSignatures, dirigido por la marca Le Cordon Bleu. Una selección de vinos, licores y champaña de cortesía se sirve por el barco durante todo el día.
El Seven Seas Voyager cuenta con muchas instalaciones de entretenimiento y ocio. Desde la sala de conferencias a la piscina pasando por la biblioteca bien surtida, la oferta de actividades a bordo es muy diversificada. En cada escala, los cruceristas podrán disfrutar de unas horas en tierra firme para visitar los lugares más emblemáticos de los países atravesados. A bordo del Seven Seas Voyager también encontrarán tiendas libres de impuestos en las cuales podrán comprar todo lo que deseen. El spa y el fitness por su parte son una invitación a la relajación.
Para el deleite de los gourmets, el Seven Seas Voyager ofrece siete formas diferentes de disfrutar de su gastronomía. En el Compass Rose, la cocina se inspira en las tradiciones culinarias de la cocina europea. También podrán ir al restaurante "La Veranda", más informal. Toda la gastronomía de a bordo lleva la estampilla de Blue Riband de "Le Cordon Blue" de París. Si lo prefieren podrán optar por el Prime 7 y su cocina típicamente americana, como el steak Porterhouse y las ostras Rockefeller.
Por la noche, los pasajeros del Seven Seas Voyager no tienen tiempo para aburrirse. Es posible comenzar con una copa en el Connoisseur Club antes de ir al Voyager Lounge , que se transforma en discoteca o karaoke después de la cena. Asistir a un espectáculo en el Teatro Constellation es otra alternativa para disfrutar de su velada a bordo del Seven Seas Voyager. Si desean un poco de tranquilidad podrán sentarse tranquilamente en el Observation Lounge y admirar el maravilloso paisaje que desfila delante de sus ojos.
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